¿Aún no has leído el Quijote?

En otra entrada ya hablamos del Quijote. Hoy quiero reflexionar sobre la forma de llegar a él. Por supuesto no es lo mismo que te lo mande el profesor de lengua para un examen, que leerlo a nuestro ritmo, saltando lo que nos aburra y releyendo lo que nos gusta. Yo, reconozco que he sido muy afortunado por la manera de llegar al Quijote. A las pruebas me remito:

                             

Tengo la suerte de haber conocido el Quijote siendo un niño gracias a una maravillosa serie de dibujos animados creada en 1979: Don Quijote de la Mancha. Treinta años después recuerdo perfectamente la sintonía, así como las voces de Fernando Fernán Gómez (Don Quijote) y de Antonio Ferrandis ( Sancho Panza):

La serie aún se vende, ahora en DVD porque es una fantástica manera de dar a conocer la obra a los más pequeños, y a los no tan pequeños. ¿Tengo que escribir que os la recomiendo de todo corazón? Más actual, aunque sigo prefiriendo la anterior, es la versión que los Lunnis hacen de la obra.

Años después identifiqué a Don Quijote con Fernando Rey, y a Sancho con Alfredo Landa, que interpretan maravillosamente a los dos personajes en la serie de Televisión Española que ahora está disponible al completo en la página web de RTVE, pinchando aquí, para verla cuando quieras. ¿Dudas de su calidad? Pues como los melones, a cala y a cata. Ahí va la escena de los Molinos de viento:

Hace tiempo recibí esta presentación que nos muestra con preciosas imágenes un recorrido por España siguiendo los pasos de Don Quijote. No dejes de verla.

Y ahora la reflexión: si el Quijote es capaz de entusiasmar a niños y adultos, de hacer reír a carcajadas, de hacer llorar, de no dejarnos parar en el sofá mientras vemos las aventuras de ese viejo loco (o no tan loco), de ver cómo es engañado por los demás en la segunda parte, a pesar de su bondad... si las adaptaciones son capaces de eso, ¿no crees que el original será todavía mejor?

Aquí tienes el vínculo a la edición digital que ha preparado la Biblioteca Nacional, donde podrás encontrar, además del texto de la primera edición, otra serie de curiosidades en los diferentes enlaces.

Ah!, y que nadie diga que es un libro anticuado:

¿Quieres más vídeos? Aquí tienes. Disfruta el Quijote.