Hoy he paseado por las casetas y, aunque tenía previsto comprar poco (la crisis y los descuentos tras tantas huelgas hacen mella) no he dejado de comprar varios libros. Os digo algunos:
- La escuela de la ignorancia, de Jean Claude Michéa, editado por Acuarela y A Machado.
- Nada es crucial, de Pablo Gutiérrez, en Lengua de trapo (recomendación de los libreros).
- Acceso no autorizado, de Belén Gopegui en Mondadori.
- La realidad quebradiza, antología de cuentos de José Mª Merino en Páginas de espuma.
- Manual de recreo, de Bruno Gibert en Thule.
- Peter Pan, en la edición Pop-up de Kokinos.
Además de ojear, hojear, comprar y pasear, también pude charlar, comer, arreglar el mundo, tomar café y echar unas risas con Javier Fernández Panadero (la muñeca dolorida de tanta firma), Juan Casamayor, editor de Páginas de espuma, Cuqui y otros amigos, mientras mi pintor favorito, Antonio, cansaba a los inagotables del sector infantil.
Días así, hacen rejuvenecer décadas: no dejes de acudir a la Feria antes de que termine. Tus neuronas te lo agradecerán.
Un placer compartir un camino y tíempo, físico y de corazón, con vosotros! Un abrazo, Javi
ResponderEliminarDiría que el placer es mío, pero de acuerdo, digamos que el placer es compartido, no parezcamos españoles discutiendo quién paga.
ResponderEliminarUn abrazo.